El gatito con el divertido patrón de pieles se sienta estoicamente frente a la puerta y mira a la cámara con rencor. Más tarde se sienta en la cima de la pared y sigue quejándose. Lo más destacado es un golpe de pata pequeño pero seguro contra la puerta y un silbido. Esperemos que la pata de terciopelo ya se haya calmado. Suena un poco aterrador.
Interpretar el lenguaje hablado correctamente: cómo entiendes a tu gato
Las patas de terciopelo expresan su estado de ánimo a través del cuerpo y el lenguaje hablado. Si usa este lenguaje de gato correctamente ...